Sí, ya sabemos que el «comunista» Alberto Garzón ha renunciado, finalmente, a entrar en Acento. Pero lo ha hecho por las críticas que ha recibido; su actitud inicial le ha dejado al descubierto (si es que alguien todavía no sabía lo que era).
En realidad, de alguna manera, Garzón se ha criticado a sí mismo por pasar por una puerta giratoria, porque sin duda es lo que estaba haciendo (Acento asesora también a la Asociación Española de Empresarios de Salones de Juegos y Recreativos). ¿Cómo se ha criticado a sí mismo? En 2016 publicó un tuit que criticaba esa práctica. Y para ello utilizó, nada más y nada menos, que unas palabras de Lenin en su obra «El Estado y la revolución»).
Aquí se lo dejamos:
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