Veintiséis países se comprometieron este jueves (04.09.2025) a apoyar militarmente a Ucrania en caso de un cese al fuego con Rusia, con el objetivo de amenazar a Moscú en una estrategia de la OTAN más que conocida y que provocó el actual conflicto. Los gobiernos firmantes (entre los que se encuentra, faltaría más, el progre ejecutivo español) prometieron «estar presentes en tierra, mar o aire», declaró Macron en una rueda de prensa en París, tras una cumbre de la Coalición de Voluntarios, que reúne a una treintena de países aliados de la extrema derecha ucraniana. El presidente Macron dijo junto a Zelenski que «el día en que cese el conflicto, se desplegarán las garantías de seguridad», explicó, ya sea mediante un «alto al fuego», un «armisticio» o un «tratado de paz». El presidente ucranianio Volodimir Zelenski celebró la iniciativa para garantizar la seguridad de Ucrania.
El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, que ha intervenido por videoconferencia tras sufrir una avería en el avión de la Fuerza Aérea que debía llevarle a París. En su discurso, ha subrayado la necesidad de mantener la presión sobre Vladímir Putin para forzar un alto el fuego. «No puede haber acuerdo sobre Ucrania sin la participación de los ucranianos. No se puede discutir sobre la seguridad en Europa sin contar con la voz de los europeos», ha defendido según una patética nota remitida por Moncloa.